casa de Actividad 3: Los cuentos
Hace muchos, muchos años, en un país muy lejano y
triste, existía un pueblo en medio de un bosque, pero no un pueblo normal, lo
único que lo diferenciaba de los demás pueblos era la historia que se esconde.
Era 1967 y una niña llamada Oriana quiso investigar
una cueva que está a las afueras del pueblo, sus padres le advirtieron que no
fuera porque era muy oscura y profunda, pero ella decidió no hacerles
caso.
Mucha gente del pueblo tenía miedo de esta cueva ya
que todo el mundo que entraba no salía, hasta que la niña decidió adentrarse a
la cueva, todos estaban asustados por lo que podía pasarle.
Un día más tarde, en la cueva, Oriana se empezó a
sentir muy extraña, sentía que sus fuerzas empezaban a acabarse, cuando de
pronto escucho pasos, ella no decidió darle importancia, porque quizá era algún
que otro animal, 20 minutos más tarde vio una luz muy potente, y vio un portal
el cual atravesó 5 minutos más tarde.
Entró en una dimensión muy extraña, los animales
hablaban, y los humanos tenían un ojo de más, Oriana muy asustada decidió
volver, pero el portal desapareció, así que decidió esconderse detrás de un
árbol. Pasaron las horas pero allí nunca se hacía de noche, entonces se
acercaron una pandilla de jóvenes, y se extrañaron mucho porque Oriana no era igual
que ellos. Le hicieron muchas preguntas, y no entendían cómo podía estar en su
mundo cuando era prácticamente imposible entrar, Oriana explicó que encontró un
portal el cual decidió cruzar, uno de ellos explicó había visto a personas como
Oriana, y allí es cuando ella se sorprendió, ¿Y si todas las personas del
pueblo que estaban desaparecidas también estaban en la misma dimensión que
Oriana?
Oriana decidió hablar con uno de los chiquillos para
decirle cuando los había visto. Al principio se presentaron, el se llamaba
Calístenes, y explicó que era el hijo de el actual emperador.
Dieron una vuelta por el poblado, y de pronto se
encontraron a una persona del poblado de Oriana, consecutivamente hasta que
encontraron a 19, que justo eran las personas que habían desaparecido, todos
ellos decidieron buscar una solución para volver a su pueblo, a si que fueron a
la casa de los portales, Calístenes les advirtió que el propietario no era muy
agradable a si que tenían que ir con cuidado. Cuando salieron de la los portales
salieron con 20 piedras, una por persona, para salir de la dimensión tenían que
formar un círculo y empezar a cantar el himno de su poblado.
Antes de todo eso Oriana le dio las gracias a
Calístenes, y le dijo que pronto volvería a visitarlo, cuando ya hicieron el
ritual se encontraron otra vez en la cueva, al abrir los ojos Oriana se
encontró una carta y un amuleto, en la carta decía “siempre serás bienvenida a
nuestra dimensión, no pierdas ese amuleto, es la llave para entrar y salir de
nuestra dimensión. Calístenes”.